lunes, 24 de noviembre de 2008

Nominado como el mejor comercial del año

Hoy recibí de una querida amiga este video que tenía como subject "Nominado como el mejor comercial del año", a mi simplemente me encantó por el contenido y dicidí compartirlo, no solo por el mensaje, sino porque desde el punto de vista del coaching también se puede ver como un claro ejemplo de como nuestras creencias (o nuestras impresiones mentales desde el punto de vista del budismo) nos llevan casi automaticamente a sacar conclusiones a partir de como interpretamos la realidad desde nuestro mundo de significados.
Disfrutenlo.

4 comentarios:

Gen dijo...

Qué padre comercial...me dejó piel de gallina. :) GRACIAS por compartirlo.

hana matsumoto dijo...

Me encanta que ya empecemos a darle la importancia que merece a la relación mente-cuerpo! Los comerciales no solo sirven para vender miedo no?

Gracias !

Miguel Angel Ruiz dijo...

Si, la verdad es que los comerciales inteligentes y sensibles como este, que transmite un mensaje más alla de reforzar una necesidad creada, pueden influir mucho más en la lealtad a la marca que los vincula, ¿no creen?

Aracely dijo...

Que lindisimo esta el video, me hizo nudo en la garganta, hay un comercial que me gusta tmb mucho que lo vi en el cine y luego en la tele de un señor mayor paseando con una chica joven y la abraza y van al cine y cuando estan en un restaurant el le entrega un collar de perlas y ella le agradece y tras de ella hay un espejo y se refleja su verdadera edad osea era tambien ancianita y te da la idea de el sentir de un profundo amor, osea el señor la veia asi! esta muy lindo ojala tmb lo puedan ver ustedes,.... Un beso mik!

Sobre el autor de este blog

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Estudió la carrera de ingeniería industrial, esta certificado internacionalmente como coach ejecutivo y para equipos de alto desempeño, además es aprendiz en el mundo del coaching ontológico. "...Disfruto mucho lo que hago, Me parece que tanto la disciplina del coaching y la práctica del budismo son dos formas complementarias de estar en el mundo. Hoy puedo decir que tengo el privilegio de haber seleccionado la profesión en la que me desempeño y por la que puedo crecer al acompañar a otros en sus propios procesos de transformación..."